Algo un poco distinto para el Día de Acción de Gracias
Lisa Sansom, MAPP '10, es la propietaria de LVS Consulting, una firma de consultoría independiente que ayuda a crear organizaciones positivas. Lisa provee servicios, tales como coaching tanto individual como de liderazgo, asesoramiento de trabajo en equipo, entrenamiento en comunicación efectiva, Indagación Apreciativa y consultoría de gestión de cambios. Biografía completa. Sus artículos en inglés están aquí. Puedes encontrar también sus artículos en español aquí.
Traducido por Georgina Saldaña Ocáriz
Anoche tuve una horrible pesadilla. Desperté junto a alguien que no era mi marido y que de alguna manera entró a mi casa y a mi recámara, pensando que estaba en otro lado. Aunque estaba terriblemente asustada, se fue y dejó su mochila. Cuando fui a devolverla, terminé en una oficina que solía ser mi lugar de trabajo y no pude salir de ahí. “Ah sí”, dijo la recepcionista “solías salir de esa manera, pero han movido todos los muebles y ahora no puedes.” Ella no pudo mostrarme la salida.
Luego las cosas se transformaron, como sucede en los sueños y estaba corriendo por mi cocina tratando de hacer la cena. El pan de ajo no se quedaba quieto en la charola del horno y se mantenía amontonándose en la orilla, y luego la olla se estaba derramando y luego el horno se atascaba en el ciclo de auto limpieza y el pan de ajo se quemaba hasta quedar duro. Seguí llamando a mi marido por su nombre mientras me tambaleaba de una crisis culinaria a otra, y aunque sabía que él estaba en casa y podía oírlo, nadie venía. Grité hasta quedar ronca. Sin hacer ningún otro ruido más que sollozar, me caí en el piso mientras mi cocina se quemaba. Desperté con lágrimas reales, con dificultades para respirar.
A la luz del día, esto no parece horrendo como se sintió a las 5:30 a.m. Quizá hay algo de humor extraño ahí, pero se sentía real y hoy estoy agotada, lo cual es mi estado para casi todo. Estoy agotada.
¿Más autocuidado?
No hay duda de que hemos tenido mucho en juego: una gran mudanza, tener a mis hijos adolescentes en nuevas escuelas, tratar de reiniciar mis actividades como coach y conferencista después de tres años de inactividad mientras estaba empleada a tiempo completo en otro lado. Muchas sólidas razones para estar agotada. Así que fui a ver a un terapeuta para saber qué podía hacer.
Después de casi 45 minutos de divulgar una versión muy abreviada de mi vida e historias actuales de agobio, todo lo que saqué del terapeuta es que necesitaba más auto cuidado. Tenía ganas de decirle que el auto cuidado esos días era tomar dos Advil en la noche para que mi espalda no me doliera y esperar a tener 8 horas de sueño de buena calidad. Hice un propósito en enero de hacer el 2017 mi “año de sueño” y he sido capaz de hacerlo casi siempre, pero el agotamiento emocional permanece, incluso cuando he estado menos agotada físicamente.
Otra respuesta
Esa noche, llevé a mis hijos a ver a la Dra. Brené Brown hablar sobre su nuevo libro Braving the Wilderness (Desafiando a la naturaleza). No la había visto hablar en vivo antes, aunque la había visto en TED hablar sobre vulnerabilidad, por supuesto. Con más de 30 millones de visitas, es una de las charlas más visitadas de la historia. Estuvo fantástica. Incluso cuando una crisis médica en la audiencia detuvo el evento, ella se mantuvo calmada y con recursos, pidiendo a los doctores que se presentaran y pidiendo a todos que permanecieran sentados para que los paramédicos pudieran entrar y atender a la persona. Ella estaba serena, pensativa, ingeniosa y sensata.
Yo tomé dos cosas de su charla también: una es que no importa de qué lado de la política estás, lo que importa es de qué lado de la humanidad estás. La otra, su consejo final para la audiencia, es hablar contigo mismo de la misma manera en la que le hablarías amablemente a alguien más dentro de tu círculo de inclusión moral, y debemos hacer ese círculo tan amplio e incluyente como sea posible. Hubo otras cositas de sabiduría, pero esas resonaron. Entonces tuve mi pesadilla.
Algo un poco distinto para el día de acción de gracias
Nos acercamos al día de acción de gracias en los Estados Unidos, y aunque yo soy de Canadá, estamos en los Estados Unidos este año y celebraremos el día de acción de gracias con algunos parientes cercanos. Soy afortunada no sólo de tenerlos cerca, sino también de que hayan sido tan amables y nos recibieran.
Parece que cada año alrededor del día de acción de gracias, a la gente le gusta citar el trabajo del Dr. Robert Emmons sobre la gratitud. Se vuelve de rigor contar tus bendiciones y enumerar las cosas por las que estás agradecido. Pero me gustaría proponer algo un poco distinto este año.
Todos los que conozco están estresados. Cada mamá que conozco está en crisis. Todos mis amigos cercanos, cercanos emocionalmente, aunque lejanos geográficamente, están sufriendo, y hay una enfermedad física o mental real en sus familias. Algunos casos son realmente situaciones de vida o muerte, lo cual hace que mi lucha con mi hijo de 13 años y su altamente problemática integración a una nueva escuela, palidezca en comparación. De verdad no debería estar quejándome. Sin embargo, incluso cuando pongo mi propio horno en auto limpieza, se atasca, y me quemo.
Me gustaría proponer que nos acerquemos a los demás, para poner a más personas en nuestros círculos de inclusión moral y les hablemos amablemente.
No tengo en mí ningún otro auto cuidado. No puedo pensar en nada más para mí cuando extraños se están infiltrando en los espacios más íntimos que tengo. La familia me necesita, y simplemente no puedo “ponerme primero” aunque la gente diga que debería. Pero, de alguna manera, todavía puedo reunir el valor y la energía para acercarme a mis amigos y estar ahí para ellos. Puedo actuar y ser de tal manera que quizá, estarían agradecidos conmigo.
Acércate a los demás. Amplía tu círculo de inclusión moral. Habla amablemente a aquellos que lo necesitan, incluso si no lo están pidiendo. Ayúdales a encontrar su salida a través de tu relación con ellos y de la compasión. Crea comunidad. Está del lado de la humanidad.
Referencias
Brown, B. (2017). Braving the Wilderness: The Quest for True Belonging and the Courage to Stand Alone. New York: Random House.
Emmons, R. (2013). Gratitude Works!: A 21-Day Program for Creating Emotional Prosperity. San Francisco: Jossey Bass.
Baking oven courtesy of davidmulder61
Moral circle courtesy of ulisse albiati
Stopping to chat courtesy of Maria Eklind